Las drogas tóxicas, fuente de destruccion masiva (4ª parte)

Las drogas tóxicas, fuente de
destrucción masiva (4ª parte)

En esta cuarta parte como sigue en la tabla de los estupefacientes, describiremos el Cannabis, una de las drogas más utilizadas en toda Europa y en todo el mundo, por que puede plantarse en cualquier tipo de suelo, simplemente con la necesidad de un clima cálido o templado, de critica de unos y de otros, por sus posibles y dudosos efectos curativos.

Cannabis
Historia

En el año 2737 a C., en China, se registra la primera descripción de la planta.

En el norte de Persia durante el siglo XI, se convirtió en el agente de influencia de una secta que se destacaba por la fruición con la que sus miembros perpetraban salvajes asesinatos. El jefe de aquel grupo, llamado Hassan Sabah, fue quien introdujo el uso de cannabis entre las bandas de asesinos, como recompensa por trabajos bien realizados. El cannabis, introduciendo por Hassan, tomó el nombre de “hachisch” o “don de Hassan”, y sus hombres se convirtieron en los “hombres bajo la influencia del hachisch”, de donde derivó el singular término árabe de “haschischin”. El nombre ha perdurado bajo distintas formas en diversas lenguas, dando en español el término “asesino”.

Posteriormente, en el siglo XIII, el cannabis llego al continente Africano.
En 1920 la droga empieza a utilizarse como estimulante en Méjico, por los jornaleros que pasaban por la frontera de Texas a EE.UU., extendiéndose posteriormente esta forma de uso a todo el mundo.

Botánica de la planta La planta llamada CANNABIS SATIVA L, crece en todas las regiones del mundo donde exista un clima cálido o templado y en cualquier tipo de suelo. Es de sexo dioico, es decir, con dos plantas distintas, una masculina (que produce el polen) y otra femenina (que produce el fruto o el cañamón).

El color de la planta, generalmente, es verde, aunque en la zona de Afganistán y Pakistán presenta unas coloraciones rojizas, y su altura oscila entre 2 y 4 m. Las hojas, dispuestas en folíolos con un número impar de hojas, de 3 a 13, presentan los bordes dentados y su longitud es de 15 a 20 cm. El tallo de la planta adulta tiene un espesor de 2 a 5 cm. de diámetro y de él se extraen fibras tradicionalmente empleadas para usos industriales de cordelería, calzado, lonas, etc. La aparición en el mercado de otras fibras naturales y sintéticas hizo que los cultivos sufrieran una notable disminución. Al igual que en el cultivo de la adormidera, existe una empresa explotadora, la cual delega en agricultores, quienes deberán vender su producción a dicha empresa. La recolección varía según el destino de la plantación:

a) Las industriales comenzarán a recolectarse al final de la floración.

b) Las destinadas a cañamones tendrán que recolectarse una vez que el fruto esté formado.

c) Las destinadas a drogas se recolectan una vez que comienzan a amarillear las hojas inferiores de la planta, previa eliminación de las plantas machos, con objetos de que no polinicen las flores femeninas.

La legislación española especifica que podrá ser cultivada toda especie de cáñamo con fines industriales siempre que éste no contenga propiedades alucinógenas. Por lo tanto, con el fin de que su cultivo sea posible industrialmente, el Ministerio de Sanidad autoriza todo cultivo cuyas plantas tengan un porcentaje de THC no superior al 0,6%.

Principios activos de la planta

Los principios activos se encuentran en unas formaciones pilosas que rodean las flores femeninas, con forma de recipiente, y, en cantidad menor, en tallo, hojas y semillas. Estos principios activos son:

THC Tetrahidrocannabinol.
Ácido THC Transtetrahidrocannabinol.
CBN Cannabinol
CBD Cannabidiol
Los dos primeros son los más psicoactivos y los dos últimos son pocos activos.
Diversas preparaciones de Cannabis

Existen más de 200 denominaciones de los preparados derivados del cannabis, según los países que los producen. Las más extendidas son:

Marihuana: Consiste en el picado e toda la planta. También puede presentarse en rama o molida. Su riqueza activa oscila del 0,5% al 2% de THC, según se haya utilizado toda la planta o solamente las hojas en su elaboración. En España también se le llama hierba, griffa, Kiffi, congo, bhang, etc.

Ganja: Para su elaboración solamente se utilizan las flores femeninas prensadas, sin hojas y tallos. Su riqueza en THC oscila entre el 3 y el 4 %. Prácticamente se desconoce su uso en España.

Hachís: Preparado a base del polvo resinoso segregado por las sumidades floríferas de la planta hembra. Su riqueza en THC oscila entre el 5 y el 12 %, según se haya empleado exclusivamente la resina o haya sido adulterada con otras partes de la planta molida. En España también es conocido con los nombres de chocolate, mierda, hash, costo, etc. En las últimas fotos aparece el hachís, que como se ve en la foto de arriba ya elaborado, es de un formato resinoso, que suele ser empaquetado, y suele ser decomisado en su contrabando.

Aceite de hachís:

Líquido alquitranoso, obtenido de la destilación de la planta o del propio hachís. Su riqueza en THC oscila de un 20 a un 70 %. Normalmente se le conoce con el nombre de “aceite”.

Obtención del Hachís

Se obtiene de distintas formas, según el lugar de donde proceda. Aquí vamos a decir por encima como se obtiene, y cuales son los materiales producidos.

En África del Norte se atan las gavillas de las plantas, sin las raíces, y secas, se golpean sobre una tela fina de seda inclinada que desemboca en un recipiente, donde va a parar el primer polvo fino denominado “sputnik”. Si se golpea otra vez la rama se obtiene una segunda muestra de menor calidad llamada “doble cero”. A sucesivas extracciones corresponden los denominados “1ª clase”, “2ª clase”, etc, cada vez con menos concentración de THC.

Generalmente de 100 kilos de planta se obtiene un kilo de hachís, por lo que para poder producir hachís, se hace falta una gran producción.
Esta es la forma de la obtención, pero no de su empaquetamiento, que no interesa.

Bango

Es un sustituto barato del hachís en Egipto. Posiblemente, es la droga más barata que se puede conseguir en el mercado. SE trata de una planta que crece en zonas desérticas, en particular en el SINAB, y se utiliza en forma de polvo obtenido de las plantas secas para liar cigarrillos.

Sus propiedades son similares a las del hachís: estimula y relaja el sistema nervioso central, retarda las reacciones y produce irritación ocular y dilatación de las pupilas. El peligro aumenta cuando se consume junto con depresores o estimulantes, por ejemplo derivados de las anfetaminas.

Formas de consumo

La marihuana se consume fumada en cigarrillos artesanales, hechos con o sin boquilla.

El hachís se consume pulverizado y mezclado con tabaco, liando posteriormente cigarrillos, denominados “porros”, “canutos”, “petardos”, etc.

Los útiles para el consumo de estos productos son el papel de fumar y las pipas.

El aceite de hachís se fuma en pipa como el hachís, o bien impregnándolo en golosinas o alimentos, así como mezclado con bebidas alcohólicas. También impregnando el papel de un cigarrillo de tabaco con aceite de hachís.

Efectos del Hachís

Son bastantes rápidos y dependen igual que con el resto de las drogas, no sólo de la calidad y cantidad ingerida, sino de la predisposición de ánimo y ambiente en que se encuentra el consumidor.

Los principios activos de la planta entran rápidamente en el sistema circulatorio sanguíneo, empezándose a sentir los efectos a los 15 minutos de su consumo y permaneciéndose de 2 a 4 horas.

Una borrachera cannábica es parecida a una borrachera alcohólica, y los efectos fisiológicos más característicos son la dilatación de pupilas y un fuerte aliento que denota se ha consumido cannabis.

- En dosis sociales (1 ó 2 cigarrillos):
Sensación de bienestar, alegría e inquietud al principio. Sigue un estado de despreocupación y relajamiento; potenciación del oído y demás sentidos corporales. Sensación de apetito. Sus efectos son parecidos a un par de copas de alcohol, el individuo se “abre” a las sugerencias de otras personas.

- En dosis más altas:
En general, los efectos son los mismos que los descritos en el párrafo anterior, pero más intensificados. Empiezan las sensaciones anormales que cambian velozmente, el individuo comienza a perder la atención. Se suceden ideas fantásticas, pérdida de la memoria inmediata, pensamientos interrumpidos, asociaciones mentales desordenadas y pérdida del sentido de la propia identidad. Puede dar lugar a pánico y ansiedad si el individuo está poco habituado a esta droga.

- Dosis muy alta:
Distorsiones de la imagen corporal. Fantasía manifiesta y alucinaciones que llegan hasta la psicosis mental. Esta es la razón de que esta droga sea catalogada entre los alucinógenos.

Peligros del cannabis

No desarrolla dependencia física ni tolerancia, pero sí dependencia psíquica. Su consumo puede desembocar en muchos casos en los que se ha dado en llamar la “escalada de la droga”, pues se ha demostrado que un 90% de los heroinómanos y otros abusadores de drogas mayores se iniciaron en el consumo de productos cannábicos.

Por otra parte, subsisten los peligros hacia la criminalidad en el que usa esta droga, pues para comprarla se necesitan fuertes sumas de dinero conseguidas pro medio del robo, estafa atraco, prostitución, etc. y en muchos casos , con la reventa de la propia droga a precio superior al de adquisición.

Los peligros físicos más importantes son los siguientes:

- Merma en un 40 % los sistemas de defensas contra infecciones.
- Taquicardia, cáncer de pulmón. Lesiones cerebrales.
- También existen teorías de que pudiera dañar a los cromosomas

Se habla con frecuencia sobre si esta droga es afrodisíaca. En realidad parece ser que no lo es por sí misma, sino que su consumo inhibe al individuo de los condicionamientos sociales, prestándose a hacer actos que no haría en estado normal; por ejemplo, el individuo pierde el pudor sexual; esto hace que sea frecuente el uso del cannabis entre los homosexuales.

Sintomatología del consumidor de cannábicos

Dilatación de pupilas. Zumbidos de oídos. Náuseas. Vómitos. Palidez. Cutis terroso. Uñas quebradizas. Caries dentales. Enfermedades capilares. Ansiedad. Agresividad. Reacciones antisociales. Pérdida de concentración y memoria. Conjuntivitis.

Combinados a base de cannábicos

Mayum: Mezcla de hachís, dátiles y frutos secos, utilizada por los árabes como afrodisíaco.

Chatarabi: Mezcla de hachís, azúcar y aguardiente de arroz, utilizada como bebida en Egipto.

Henna

La palabra Henna (Ghena o Jenna) deriva del árabe Al-Hina. Es el nombre de una planta muy pequeña de la cual se obtiene un polvo colorante tratando las hojas con lechada de cal.

Se emplea por parte de los pueblos africanos para teñirse las uñas, los cabellos, las palmas de las manos y las plantas de los pies, así como el resto del cuerpo, para acicalarse con ocasión de ceremonias religiosas o bien como simple maquillaje estético personal. En Occidente se vende en herboristerías para aplicaciones en el cabello con la finalidad de dar a éste brillo y manejabilidad.

Se trata de un producto totalmente inocuo.

La mención de la Henna aquí, es debido a que posee unas características parecidas al hachís en cuanto a su aspecto (aunque suele ser más fino su polvo), color y olor, por lo cual se suele utilizar:

Como adulterante del hachís.

Como objeto de “delito imposible” al ser detectada en la aduana a “traficantes” inexpertos, a los que han engañado sus vendedores, haciéndoles creer que lo que han comprado es hachís.